Amores perros

Cómo amarte sin quedarme atrapado en ti apasionadamente.

Me es imposible pensar que lo nuestro es eventual,
que mañana puedas estar disfrutando con otro
y pasado me busques para seguir con lo nuestro,

¡Yo no sé duplicarme! o 1 o 0, o sí o no,
o blanco o negro.

Tengo un lastre moral del que no puedo renegar tan fácilmente.

¡De cabrones está el mundo lleno!

¿Hasta dónde he de llegar para no sentirme uno de ellos?

¿Por qué no te puedo prometer la luna? ¡si lo deseo!

...

Mi nueva pregunta es ¿quién es más cabrón?: el que se entrega totalmente y a los 2 días se da cuenta de que no quiere más y la deja; o el que tiene sus cartas repartidas entre varias y no come ni deja comer.

Perdí mi norte

Si tuviera alas volaría hasta encontrarte,

pero el destino es tan caprichoso que en el cielo no estarías.
Pasarías bajo mis pies y ni siquiera te percibiría
tan sólo me daría cuenta cuando tú ya hubieras pasado
y a mí llegara tras tiempo el perfume de tus labios que los míos añoraron.

Bajaría a la tierra a procurar tu nombre
pero en la inmensidad del bosque te perdería.
La cualidad de tu rastro se mezclaría
con infinidad de olores de sed y hambre.

Maldito viento, maldita gente.
Perdí esperanzas, perdí mi suerte.
Maldita atmósfera de miedo y muerte.
Maldito imán... perdi mi norte.

En mi oscuridad me encierro,
en mi soledad me pierdo.
Es tan evidente por qué no te encuentro...
me creo muerto para olvidar tu aliento.

Perdido en mis cuatro paredes me encuentro.
Hallado en mi lecho oscuro me pierdo.
Encerrado en mi alma me miento.
Y mientras tú me buscas yo ya estoy muerto.

QUISE (Ángel González)

"Quise mirar el mundo con tus ojos
ilusionados, nuevos,
verdes en su fondo
como la primavera.
Entré en tu cuerpo lleno de esperanza
para admirar tanto prodigio desde
el claro mirador de tus pupilas.
Y fuiste tú la que acabaste viendo
el fracaso del mundo con las mías."

En coma profundo pero sintiendo

En coma profundo pero sintiendo.

"Su imagen me persigue: duerma o vele, ...
Cuando cierro los párpados... dispongo claramente sus ojos negros.
Me duermo y los veo también...
¿Qué es, pues, el hombre, ese semidiós tan ensalzado?
¿No le faltan fuerzas cuando más las necesita?
Y cuando bate sus alas en el cielo de los placeres,
lo mismo que cuando se sumerge en la desesperación,
¿no se ve siempre detenido y condenado a convencerse de que es débil y pequeño,
él, que esperaba perderse en lo infinito?"

Y la luna era llena

Y la luna era llena... pero una intensa niebla impedía la claridad...

con la torpeza de quien no ve...
...tratando de alcanzar el tren que tiene demasiada velocidad...

Suerte tuvo de no morir arrollado.

Volverá, algún día... otro tren pasará...

No busco nada

Y cuanto más busco más lejos me encuentro.

Cuando la búsqueda no sea un deseo,
cuando dejes de probar todas las puertas,
cuando los segundos dejen de contar,
cuando creas en tu destino personal,
cuando asumas que no está en tu mano,
cuando menos lo esperes,
será entonces cuando acabes por encontrar.

La condena de buscar... no ser encontrado.

Que sepas que no te busco...
que sólo quiero encontrarme.

Tú... como la SUERTE, no se busca, se encuentra.

Incluso abiertas

Algunas cajas desbordan de sorpresas, incluso abiertas.

Otras albergan chispas de ilusión infinitamente pequeñas pero inmensamente agradables.

Y otras escondidas entre la inmensidad porque el atractivo de otras las dejan relegadas a una esquina oscura y fría.

Pero todas especiales, por eso hay abridores de cajas para todos los gustos, y por eso hasta las cajitas más apartadas encuentran su correspondiente dueño...

Silencio

Silencio, ...
¿Qué escuchas?
... eso es lo que hay.

Alma felina, impasible, escondida,
fría, distante y sigilosa...

Recelosa. Ánima inquieta.

Arrinconada por deseo propio lamiendo sus heridas.
Deseando el abrazo eterno,
complices miradas,
paralelos pensares.

Cansado, respira profundo.

Cierra los ojos. Descansa.

Amanece

Sentir el calor de tu almohada.
Despertar con el sol rozando mi cara.
Vislumbrarte sin abrir mis párpados cansados.
Refugiarme a tu vera como un niño en vientre.
Acariciar el dorso de tu mano con mi mejilla.

Sumirme en un profundo sueño...
donde en verdad existes, donde en verdad te siento.
donde mis labios rozan tus suaves besos.

El vidrio con que te miro

Insensible te llaman, imperturbable en tus formas...
personaje duro con cáscara de cristal...

Temeroso de perder tu libertad.
Hipocresía, egocentrismo en alusión.

Piedra, hielo...
hasta alma humana.

Guardia de la patente de Piedad.
Militante de causas propias y suyas.

Perfección, perfección, perfección.
(Inocente).

Eres tú, pero no cambies.
Es el vidrio con que hoy te miro.